La pradera constructora

Abstract

El congelamiento bancario que tuvo lugar en el gobierno de Mahuad, forzó a que las personas pierdan credibilidad en el sistema bancario del país, volcándose a realizar inversiones en bienes muebles e inmuebles. Esa resistencia a seguir invirtiendo y ahorrando en la banca tradicional propició a que la demanda de departamentos y casas se multiplique mucho más rápido de lo que la oferta en esos momentos podía atender. Adicionalmente, las remesas de los migrantes se convirtieron en un rubro muy importante para el sostenimiento de la economía, constituyéndose en el tercer generador de dólares del país, luego del petróleo y el banano. Una parte muy significativa de esas remesas se destinaba a la compra o construcción de vivienda para asegurar una de las necesidades más preciadas del núcleo familiar. Estos factores, entre otros favorecieron para que durante los últimos 5 años el sector de la construcción, sobre todo para el área de la vivienda, tenga un repunte muy significativo para poder atender a la sobre demanda del sector. Así se iniciaron múltiples proyectos, enfocados a ofrecer soluciones habitacionales tanto para los segmentos medio, medio alto, y alto. Actualmente pese a la crisis mundial, el sector de la construcción se ha visto en aprietos debido a la falta de crédito en el mercado por parte de la banca. El gobierno en vista de esta falta de recursos para que la gente acceda a créditos ha decido reforzar a través de créditos hipotecarios por parte del Instituto de Seguridad Social del Ecuador, sumado a esto que la banca siendo más cautelosa, ofrezca planes de financiamiento a largo plazo, hasta 15 años, con tasas de interés de alguna manera aceptables, aunque muy por encima de los parámetros internacionales para una economía dolarizada.