Estilo de crianza parental y su relación con conductas agresivas en la adolescencia

Abstract

Una de las etapas que genera mayores cambios en los individuos es la adolescencia, comprendida como la transición de la infancia hacia la adultez temprana que inicia desde los 10 hasta los 19 años. Durante este período el adolescente busca autonomía por lo que existe un alejamiento del sistema familiar para así desenvolverse en otros contextos, sin embargo, no en todas las ocasiones este periodo se desarrolla del mejor modo posible, generalmente en esta etapa se proyectan las consecuencias de las prácticas de crianza aplicadas en la infancia, ya sean estas positivas o negativas. La presente investigación tiene como objetivo general, analizar la relación que existe entre el estilo de crianza y los niveles de agresividad de las conductas en una muestra de adolescentes, esto a partir de la información recogida en base a su percepción. Este proyecto se ha planteado debido al notorio incremento de actos agresivos y violentos por parte de adolescentes a nivel mundial. Y es que, el fenómeno de forma aislada evidencia ser apenas el principio de futuras posibles conductas antisociales en los individuos. Esta investigación tiene un enfoque cuantitativo con alcance correlacional, que tiene previsto utilizar dos escalas una para clasificar los estilos de crianza y otra que evalúa el tipo y nivel de agresividad de las conductas, la cual ha sido adaptada al español. Estas escalas serán aplicadas en una muestra de 300 adolescentes, en edades comprendidas entre 13 y 16 años, los cuales serán seleccionados de forma no probabilística por conveniencia y con base en criterios de inclusión y exclusión en 3 colegios públicos y 3 colegios privados esparcidos por zonas norte, centro y sur en la ciudad de Quito. A partir de esto se propone una intervención a través de programas educativos que son implementados dentro del sistema familiar y que han demostrado efectividad en sus resultados, como la escuela para padres y madres, la cual motiva al cambio de ciertas prácticas relacionales entre padres, madres e hijos, y además puede ser utilizado para la prevención de dinámicas problemáticas en el hogar.